lunes, 18 de noviembre de 2013

Cassoulet



Hola a tod@s

Hace unos días  me di de alta en el Círculo Whole Kitchen y ya tenia ganas de ponerme a trabajar en el reto que plantean mensualmente. Las recetas no son precisamente fáciles pero son muy interesantes y se aprende mucho poniéndolas en práctica. 

Whole Kitchen en su Propuesta Salada para el mes de noviembre nos invita a preparar un clásico de la cocina francesa, el Cassoulet.

Bueno, antes de entrar en materia me he estado documentando que siempre viene bien para saber con qué me enfrento.

El nombre Cassoulet viene del recipiente donde se cocina este plato. Es un recipiente hondo de barro que puede meterse en el horno, en resumen, una cazuela o cassola (en catalán). El origen del plato se pierde en la noche de los tiempos, ahora en serio, es un plato antiguo y de origen campesino. La base son judías blancas remojadas la noche anterior y cocidas a fuego lento en el horno junto con diferentes carnes y aderezos dependiendo de la zona, del cocinero y del presupuesto ya que las carnes que se añaden a la cazuela van desde trozos de carne de cerdo a confit de pato y de oca. Dice la Wikipedia que existe una "tradición" según la cual hay que aprovechar la salsa que se ha adherido al fondo de la cazuela durante la cocción de una Cassoulet para hacer la siguiente. Esto ha dado lugar a anécdotas como la que apunta Elisabeth Davis en que una Cassoulet primigenia originó un encadenamiento que duró meses, incluso años.

Y vamos ya con la receta

INGREDIENTES

300gr de judías blancas 
150gr de tocino ahumado
Un manojo de hierbas frescas (laurel, tomillo y perejil atado todo junto)
Unos granos de pimienta
2 ajos
Caldo de carne o de puchero
4 butifarras
2 confit de pato (lo he encontrado en lata en Carrefur, carísimo)
Pan duro (bastante) 
Perejil picado 

La noche anterior ponemos las judías blancas en remojo con agua fría y sal.

Al día siguiente ponemos las judías en una olla con los ajos, el caldo, los granos de pimienta, el atillo de hierbas y el bacon y hervimos durante una hora y media por lo menos. Es posible que se necesite algo menos de tiempo; vigilad que las judías no se deshagan.  Retiramos el manojo de hiervas y reservamos.

En una olla aparte escaldamos las butifarras para que suelten algo de grasa y retiramos. 
En esa misma olla escaldamos también los dos confit de pato para quitar grasa y para quitarles la piel. 

Bueno, ya lo tenemos todo. En una cazuela que pueda ir al horno (yo lo hice en una de hierro) se ponen las judías con todo el caldo y el bacon, las butifarras, los confit de pato (se pueden poner desmenuzados, yo los puse enteros) y se cubre completamente con pan rallado grueso (unos 200gr). Se mete en el horno unas dos horas (mi versión estuvo en el horno una hora y media) con la cazuela destapada.

Sacamos la cazuela del horno y antes de servir cubrimos con abundante perejil fresco picado.

Esta receta otoñal da un resultado potente y denso con un gusto buenísimo, va bien servirlo como plato único con una ensalada. 







    

4 comentarios:

  1. Te has estrenado en el Círculo Whole Kitchen con plato fabuloso y te ha quedado perfecto. La verdad es que yo también he disfrutado mucho porque me encantan los platos de cuchara y con el frío como que apetecen más.

    Un beso Anna.

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  2. Acabo de descubrir tu blog gracias a este plato y me gusta mucho tu estilo y tus recetas. ¡Nos veremos por los retos de CWK!

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